Para tu fueraborda o intraborda, una enfermera de barco es un accesorio esencial. Por la razón principal de que te permite evitar sorpresas desagradables relacionadas con una avería de combustible que generalmente se produce durante los viajes largos por el río o el lago. Ni que decir tiene que, al igual que la cisterna principal, esta cisterna portátil debe abastecerse de combustible, teniendo cuidado de respetar los procedimientos de repostaje
¿Por qué repostar desde un muelle?
A diferencia del tanque principal, un enfermera del barco es transportable. Esto es una gran ventaja, ya que minimiza el riesgo de incendio o de contaminación del aire y del medio ambiente por derrames de combustible.
Repostar desde un muelle es una medida de seguridad. Por eso, un navegante que se precie debe asegurar el barco al muelle y retirar el depósito portátil del barco cuando se reposte. El objetivo principal es evitar derrames en el barco y en el agua.
Y como se trata esencialmente de una cuestión de seguridad, no es necesario especificar que el procedimiento debe llevarse a cabo lejos de las llamas y de los dispositivos electrónicos que podrían provocar un cortocircuito que podría dar lugar a una explosión devastadora. Esto se debe a que un cuarto de litro de gasolina puede hacer el mismo daño que un cartucho de dinamita al explotar.
¿Cuál es la mejor manera de tratar con una enfermera de barco?
El alimentador del barco está en el muelle y está esperando a ser llenado. Hasta el 90% de su capacidad, para ser exactos, ya que existe un riesgo demasiado grande de que el desbordamiento se derrame por la ventilación. Y si esto ocurre, debes asegurarte de limpiar inmediatamente el muelle y la zona del depósito sobre la que se ha derramado el combustible, teniendo cuidado de guardar el trapo usado en un lugar seguro.
Pero para hacerlo correctamente, tienes que empezar por el principio, que es comprobar el tipo de combustible que se va a utilizar mirando el tapón del depósito, que está marcado como gasolina o gasoil. La elección depende de cuál de estas etiquetas se utilice.
Entonces llega el momento esperado en el que debes :
- Coloca el depósito en el suelo;
- Retira el tapón;
- Asegúrate de que la boquilla de la bomba esté siempre en contacto con el recipiente durante todo el proceso para evitar el riesgo de chispas causadas por la electricidad estática;
- Asegúrate de que los primeros litros se viertan a un ritmo reducido para evitar el reflujo, que provocará derrames y residuos.
Una vez hecho esto, sólo tienes que cerrar el alimentador enroscando bien el tapón y asegurarte de no derramarlo ni exponerlo al sol durante demasiado tiempo.
Y como este tipo de equipos se utiliza principalmente en travesías largas, es obvio evaluar la cantidad de combustible que se necesita refiriéndose a la regla básica que consiste en poner a su disposición :
- 1/3 del depósito para el viaje de ida ;
- 1/3 para el viaje de vuelta;
- 1/3 como reserva.
A diferencia del tanque principal, un alimentador de barcos es transportable. Esto es una gran ventaja, ya que minimiza el riesgo de incendio o de contaminación del aire y del medio ambiente por derrames de combustible.